La primera historia nos lleva al mundo paralelo a Hyrule Termina, correspondiente al juego Majora's Mask. Más que una historia es una curiosidad. Como es sabido, nuestro héroe tiene que hacer uso de unas máscaras "especiales" para salvar Termina de la total destrucción. Lo interesante no es el mero hecho de usar máscaras, sino que estas son, en efecto, máscaras mortuorias que contienen el alma de los seres a los que representan. ¿En que baso esta afirmación? Muy sencillo. Cuando visitas a las diferentes razas que viven el Termina convertido en uno de ellos gracias al poder de las máscaras, dicen que les recuerdas a alguien que pasó a mejor vida. Es decir, al ponerse las máscaras, Link es poseído por el espíritu del personaje al que representa la máscara (que creepy...), por lo que se podría decir que, al ponernos una máscara en Majora's, no estamos controlando a Link, sino a un Zora, un Goron o un Deku. También es curioso lo que las otras máscaras presentes en Majora's representan. Un ejemplo es la máscara para trasnochar, que Link ha de utilizar para escuchar las historias de la abuela de Anju. Esta máscara, según una de las piedras chismosas, era un método de tortura el cual hacía que aquel que tuviera puesta la máscara, moría de sueño.
La segunda historia ocurre en el Templo del Agua de Ocarina of Time. En este templo, Link ha de enfrentarse a un Link oscuro. Qué quiere decir esto? Varias cosas: la primera es que todos tenemos un lado oscuro. La segunda que nuestro principal enemigo somos nosotros mismos. Y, finalmente, que para llegar a alcanzar tus metas al primero al que has de derrotar es a ti mismo. Podríamos decir pues que este Link oscuro representa todo lo que nos aparta de nuestro destino, nuestros miedos más profundos, miedos que hemos de derrotar y hacer frente para triunfar.
Para finalizar, la última historia que quiero contar hoy explica cómo y por qué Hyrule fue inundada por las diosas.
La historia se encuadra en la llamada Era sin Héroe. Cuenta la leyenda que, tras el confinamiento de Ganondorf en el Reino Sagrado, Hyrule vivió una época de paz y tranquilidad. No obstante, un día el sello que confinaba mágicamente al Rey Gerudo se rompió y éste volvió a Hyrule. Los habitantes del reino esperaron la llegada del Héroe pero este no apareció. Por lo tanto, Ganondorf pudo conquistar Hyrule sumiendo el reino en las sombras. Tras muchos años de tiranía por parte del Rey Gerudo, El pueblo imploró a las diosas que hicieran algo para acabar con la tiranía de Ganondorf. Las diosas comunicaron a todos los habitantes de Hyrule que se refugiaran en las zonas altas del Reino. Una vez puestos a salvo, las diosas desataron una terrible tormenta que inundo Hyrule sellándolo junto con Ganondorf y el Rey de Hyrule en el fondo del Océano. La misma leyenda cuenta como el Rey decidió dividir la Trifuerza de la sabiduría y enviar a su hija Zelda a las zonas altas de Hyrule junto con algunos de sus sirvientes.
Tras esta historia se encuentran los hechos ocurridos en Wind Waker.